Según varias fuentes existe una propuesta que se está debatiendo en estos momentos en el seno de la coalición Bildu para poner un tope al sueldo que van a cobrar sus cargos electos, tanto en ayuntamientos como en Juntas Generales y Parlamento Navarro. Este tope estaría situado en 1800 euros mensuales y se evitaría de esta forma que hubiera cargos electos con sueldos “estratosféricos” de 2.500 euros, 3.000 euros y hasta 5.000 euros.
Esta propuesta enlaza directamente con el programa electoral que Bildu ha elaborado para los pasados comicios municipales, forales y autonómicos, en el que una de sus líneas de trabajo es contener el sueldo de los cargos electos como medida para evitar en la medida de lo posible el “enquistamiento de políticos profesionales” que quieren “enriquecerse a costa del erario público”, y para acercar las condiciones de vida de los políticos a la de los ciudadanos cuya voluntad representan.
Esta medida, además, se complementará en una segunda fase, según estas mismas fuentes, con varias iniciativas institucionales encaminadas a reducir los sueldos de todos los cargos públicos en Juntas Generales, ayuntamientos y Parlamento Navarro, así como los distintos complementos, dietas y beneficios, que en la actualidad disfrutan. Estas iniciativas responderán al objetivo de contener el gasto público en aquellas áreas “menos prioritarias para la sociedad” y servirán como un gesto de “compromiso ante la ciudadanía en la coyuntura actual de crisis económica”.
Según estas fuentes, uno de los ejes de trabajo más importantes de la coalición en esta legislatura será impulsar una “desprofesionalización de los cargos públicos” así como una racionalización de los recursos que cada institución dedica a dichos cargos.
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